Peter Zumthor construyo las termas de Vals entre los años de 1993-1996 incorporándolo a un hotel ya existente desde 1970, el cual está ubicado en la loma de una pronunciada ladera del valle y sobre las únicas fuentes termales del Canton suizo de los girasoles, Graubunden. Las termas se integran con el valle y aparecen en forma de bunker con una serie de perforaciones desde las que se puede contemplar  el paisaje de todo el valle. La verde pendiente que nace en el hotel sirve de techo a los nuevos baños, una pradera de hierba que ofrece una piscina a los huéspedes. Esta disposición crea una atmósfera de parque con plantaciones naturales pero dispuestas en formas rectangulares artificiales.

 

El empleo de lajas de cuarcita   en toda la construccionla muestra una procesión de estimulos sensoriales la cual sugiere una experiencia atemporal, además de la disposición de la construcción crean una gama de sensaciones una de ellas es el empleo del hormigón el cual hace que el techo paresca pesado mientras que los huecos entre las unidades hacen que a la vez el techo también parezca flotar, además para lograr el efecto monolítico deseado se empleo un patrón de juntas de piedra textil, desarrolado tras muchos pasos de trabajo, que parecieran colocadas al azar pero en realidad sugieren un orden regular

 

La fascinación  por las cualidades misticas de un mundo de piedra en la montaña lo llevo a crear una estructura en forma de cueva o cantera, el empleo de la oscuridad y de la luz y su combinación, el empleo de los espacios cerrados y abiertos, conjuntamente con los elementos lineales fueron pensados para crear un ambiente en el cual los visitantes disfruten del lujo y redescubran los beneficios de las aguas termales, el efecto de los reflejos de luz en el agua o en el vapor saturado en el aire, el placer en la acústica única del agua que burbujea un mundo de piedra, un sentimiento de piedras calientes, y la piel desnuda, el ritual del baño, todas estas nociones guiaron a Zumthor.

 

Su intención de trabajar con estos elementos, para ponerlas en práctica de manera consciente y dotarlas de una forma especial estaba allí desde el principio. Las habitaciones de piedra fueron diseñados para no competir con el cuerpo, sino para halagar la forma humana y darles espacio, una sala en la cual estar.

 

"… trabajar este diseño arquitectónico ha significado pensar siempre en los rituales de baño. La arquitectura que hemos desarrollado paso a paso nos inspiró para ver la experiencia de bañarse en una nueva luz, para encontrar nuevas opciones y formas, para dejar de lado algunas cosas, para redescubrir las formas originales. Por el contrario, el estudio del arte de bañarse ha influenciado nuestra arquitectura. Una cierta apertura y radicalismo marcaron el camino que tomamos, acompañado por un grupo de personas de Vals a quienes la comunidad había dado la responsabilidad de supervisar el proyecto… "                                    

                                                              Peter Zumthor